Parte 3: El kosen-rufu y la paz mundial
Capítulo 25: La unión de «distintas personas con un mismo propósito» [25.1]

25.1 La unión de «distintas personas con un mismo propósito» es la verdadera imagen del kosen-rufu

El presidente Ikeda señaló una vez:

La unión de «distintas personas con un mismo propósito» no es solo un medio para hacer realidad el objetivo del kosen-rufu; corporifica, en sí misma, este ideal. En otras palabras, el mundo del budismo Nichiren está dedicado a generar hermosos lazos de solidaridad, que permitan a la gente alentarse mutuamente mientras cada uno busca ser feliz y ayudar a los otros a serlo. Además, esta filosofía de «distintas personas con un mismo propósito» puede verse como la clave positiva para superar el karma de división y de conflicto que afecta al género humano, y para abrir rutas hacia una paz duradera.

La unión de «distintas personas con un mismo propósito» es un pilar central del budismo Nichiren; una inspiradora filosofía de armonía humana. Implica la aceptación y el respeto a nuestras diferencias, y el reconocimiento de la naturaleza de buda noble y suprema que existe por igual en todos los seres. En la selección de orientaciones de este capítulo, el presidente Ikeda analiza este factor crucial para lograr el
kosen-rufu.

Nichiren Daishonin escribe:
Todos los discípulos y seguidores laicos de Nichiren deben entonar Nam-myoho-renge-kyo con la actitud de ser distintas personas pero centradas en un mismo propósito, trascendiendo todas las diferencias que pueda haber entre ellas hasta volverse inseparables como los peces y el agua en que nadan. Este lazo espiritual es la base para la transmisión universal de la Ley suprema de la vida y la muerte.1

Este pasaje esclarece que «la Ley suprema de la vida y la muerte» se transmite del Buda a los seres, en cuya vida luego se manifiesta.

En la frase «trascendiendo todas las diferencias que pueda haber entre ellas», el término «diferencias» se refiere a la tendencia a considerarnos distintos y separados de los demás, pensando que nuestra vida no tiene nada que ver con la vida de los otros. Por ejemplo, se pone de manifiesto en la preocupación egoísta por los propios intereses, por la indiferencia o incluso la hostilidad hacia los demás, y por la propensión a dejarse manejar por las propias emociones.

La verdadera herencia del budismo no fluirá en una comunidad de practicantes cuyo corazón esté dividido o tenga propósitos contradictorios. Por eso, el Daishonin reiteradamente advierte en sus escritos que no incurramos en este tipo de conducta.

«Inseparables como los peces y el agua en que nadan» se refiere a estar muy conscientes de la relación profunda e inextricable que mantenemos con nuestros camaradas de fe. Es una metáfora de todos los que asumen la misión conjunta del kosen-rufu apoyándose y respetándose unos a otros como preciados e irreemplazables compañeros de lucha.

Por su parte, «distintas personas con un mismo propósito» significa que cada uno haga valer lo mejor de su personalidad y de sus cualidades individuales sin dejar por ello de avanzar en unión hacia el noble objetivo del kosen-rufu. El Daishonin esclarece que la herencia de la Ley que fluye en su vida se transmite mediante la unión de «distintas personas con un mismo propósito». Late con vigor en la existencia de cada individuo que se dedica a cumplir el gran juramento del kosen-rufu.

El Daishonin, además, observa: «Aquí yace el verdadero objetivo de la propagación de Nichiren».2 Nos dice con ello que unirnos con la postura de ser «distintas personas con un mismo propósito» es de crucial importancia para poder transmitir ampliamente la Ley. En general, se suele pensar en la unión como un medio para lograr un fin. Sin embargo, el punto al cual se refiere el Daishonin —unirnos con el compromiso conjunto de ayudar a todas las personas a ser felices a través de la enseñanza budista correcta— es, en sí, el epítome de la armonía humana y la verdadera imagen del kosen-rufu. Dicho de otro modo: no es un medio sino el fin. El Daishonin declara también que si avanzamos con esta unión de propósito, «hasta el gran deseo de la propagación universal podrá concretarse».3

Del capítulo «Los verdes campos», del volumen 17 de La nueva revolución humana.

Sabiduría para ser feliz y crear la paz es una selección de las obras del presidente Ikeda sobre temas clave.

  • *1La herencia de la Ley suprema de la vida, en Los escritos de Nichiren Daishonin, Tokio: Soka Gakkai, 2008, pág. 227.
  • *2Ib.
  • *3Ib.