Parte 3: El kosen-rufu y la paz mundial
Capítulo 22: La misión y el juramento de los Bodisatvas de la Tierra [22.6]

22.6 Lo que distingue a los practicantes del budismo Nichiren es la acción

El presidente Ikeda explica que los Bodisatvas de la Tierra son personas de acción, y que la fuerza motriz del kosen-rufu existe en practicar y propagar activamente la Ley Mística en el mundo real.

La vida no es teoría; es acción. El corazón del budismo, que enseña la esencia de la existencia humana, también se encuentra en la acción.

Nichiren Daishonin escribe: «El propósito con el cual nació en este mundo el buda Shakyamuni, señor de las enseñanzas, yace en su comportamiento como ser humano».1 Este pasaje familiar nos dice que el propósito del budismo es enseñar el comportamiento y la conducta recta para el ser humano. La acción correcta conduce a una vida correcta y engloba la enseñanza budista correcta.

El Daishonin también escribe: «[E]l budismo no existe sin práctica y estudio».2 En otras palabras, el budismo no se encuentra fuera de nuestro esfuerzo por practicar las enseñanzas en nuestra vida personal y transmitir a otros. El Daishonin da a entender que la verdad del budismo no pasa por la elocuencia con que podamos hablar de sus principios. Este es un punto fundamental, de extrema importancia.

En otro escrito, el Daishonin cita las palabras: «[B]asar la mente en la novena conciencia y sostener la práctica con las seis conciencias3».4 Esto significa que debemos basar nuestro corazón en el estado de vida más puro y esencial, pero a la vez practicar el budismo en el mundo real, siempre dispuestos a forjarnos y superarnos a nosotros mismos. De esta manera, el Daishonin recalca la importancia de llevar a cabo la práctica budista en el contexto de la realidad social.

El Sutra del loto describe la aparición de los Bodisatvas de la Tierra.5 Su surgimiento desde lo profundo de la tierra es muy significativo en muchos niveles, pero el punto esencial es que son bodisatvas con una misión innata que proviene desde el remoto pasado, con un deseo activo y jubiloso de ocupar su lugar en las filas del pueblo. Esto ocurre en el plano más profundo de la vida, y no tiene nada que ver con las apariencias externas ni con las formalidades terrenales.

Los que propagan la Ley Mística en el mundo real son los Bodisatvas de la Tierra; es decir, nosotros, los miembros de la Soka Gakkai.

Los cuatro líderes de los Bodisatvas de la Tierra se llaman Prácticas Superiores, Prácticas Ilimitadas, Prácticas Puras y Prácticas Consolidadas. La palabra «prácticas» forma parte del nombre de todos ellos. Esto quiere decir que son individuos de acción, no personas teóricas. Actuar sin reservas prueba que somos Bodisatvas de la Tierra.

Sin acción, no se construye nada; no se logra ningún éxito o felicidad. Esto se aplica a cada aspecto de la vida y de la sociedad. La crítica sin acción es mera queja. La queja destruye nuestra fe y nos desvía del camino hacia la dicha.

La vida es movimiento; el universo y la Tierra se mueven a cada instante; las plantas, los animales y los seres también poseen un dinamismo perpetuo. La vida es actividad, es ocupación. Una buena vida es el resultado de buenas acciones. Y una vida espléndida se logra manteniendo acciones correctas en forma incesante, día tras día. Por eso las personas que triunfan son las que siguen esforzándose y avanzando en cualquier circunstancia.  

La verdadera esencia del budismo palpita en sus actividades diarias, donde resplandecen siempre los beneficios de la Ley Mística; por ejemplo, cuando participan en reuniones por el kosen-rufu con sincero espíritu de búsqueda, dispuestos a aprender algo nuevo y a dialogar cálidamente con sus familiares o vecinos, decididos a ser felices juntos.

Del discurso pronunciado en una reunión nacional de líderes de la División Femenina, celebrada en Tokio el 17 de abril de 1992.

Sabiduría para ser feliz y crear la paz es una selección de las obras del presidente Ikeda sobre temas clave.

  • *1Las tres clases de tesoros, en Los escritos de Nichiren Daishonin (END), pág. 893.
  • *2El verdadero aspecto de todos los fenómenos, en END, pág. 408.
  • *3Se desconoce el origen de esta cita. Con respecto a las nueve conciencias, las primeras cinco se refieren a los cinco sentidos: vista, oído, olfato, gusto y tacto. La sexta conciencia integra las percepciones de las cinco primeras en representaciones coherentes. En la novena conciencia, llamada amala, no existen impurezas kármicas; esta es la fuerza purificadora fundamental que denominamos «naturaleza de buda».
  • *4El infierno es la Tierra de la Luz Tranquila, en END, pág. 480.
  • *5Bodisatvas de la Tierra: Hueste inmensurable de bodisatvas que irrumpen del seno de la tierra y a quienes el buda Shakyamuni confía la propagación de la Ley Mística o esencia del Sutra del loto en el Último Día de la Ley.