Parte 3: El kosen-rufu y la paz mundial
Capítulo 21: Una vida dedicada al kosen-rufu [21.2]

21.2 Que los jóvenes sucesores formen una corriente cada vez más numerosa y sigan el camino del kosen-rufu

El presidente Ikeda explica que la savia vital de nuestro movimiento por el kosen-rufu mundial yace en la presencia de discípulos que continúen la labor del mentor abriendo el camino a la felicidad y a la paz de todas las personas.

El kosen-rufu mundial es el deseo y la convicción de Nichiren Daishonin, el Buda del Último Día de la Ley. El Daishonin confió esta misión colosal a los discípulos que seguirían sus pasos.

En El comportamiento del devoto del «Sutra del loto», exhorta: «Discípulos míos, ¡formen filas y síganme: ¡superarán incluso a Mahakashyapa o a Ananda, a T’ien-t’ai o a Dengyo!».1

El Daishonin dirigió estas palabras de aliento a sus discípulos en un momento de grandes tensiones, precisamente antes de la persecución de Tatsunokuchi.2 Desde el comienzo, las esperanzas que depositó en sus sucesores respondieron a una visión global. Por ejemplo, los exhortaba a superar a los diez discípulos más destacados del buda Shakyamuni en la India, a los grandes maestros T’ien-t’ai y Nan-yüeh de la China, y al gran maestro Dengyo del Japón; es decir, a figuras cuyos nombres brillaban en los anales del budismo y en la historia de la humanidad. Aunque en ese pasaje se mencionan solo nombres de personajes de la India, la China y el Japón, no hay duda de que la mirada del Daishonin abarcaba el mundo entero.

En el pasaje inmediatamente anterior al que acabo de citar, el Daishonin señala que, en todo el tiempo transcurrido desde la muerte de Shakyamuni, nadie había propagado la Ley Mística. Luego, declara resueltamente: «Ahora que ha comenzado el Último Día de la Ley, yo, Nichiren, soy el primero en iniciar en todo Jambudvipa [el mundo entero] la propagación de los cinco caracteres de Myoho-renge-kyo3».4

De tal manera, cuando dice «síganme» está pidiendo a sus discípulos que continúen su ejemplo y propaguen la Ley Mística en todo el mundo, tal como hace él. Les pide que escriban una historia de proezas que sea elogiada por toda la eternidad.

La única que ha obrado de esa manera es la Soka Gakkai, y sus predecesores en la fe, que lucharon con tesón a mi lado. No existe un honor más preciado. Espero que nuestros miembros de la División de Jóvenes, a través del mundo, formen filas y sigan este camino del kosen-rufu en número cada vez mayor.

El capítulo «Asuntos pasados del bodisatva Rey de la Medicina» del Sutra del loto señala: «[D]ebes propagarlo [al Sutra del loto] en todas partes ampliamente [es decir, lograr el kosen-rufu], en todo Jambudvipa [el mundo entero], y jamás dejar que se extinga, ¡ni debes dejar que saquen ventaja los demonios malignos, la gente del demonio, los seres celestiales [como el Rey Demonio del Sexto Cielo]5, dragones, yakshas, demonios kumbhandas [que consumen la vitalidad de las personas] y otros!».6

La exhortación del Sutra del loto es a no dejar que se detenga la propagación de esta enseñanza, ni a permitir que las funciones demoníacas tomen ventaja. Estas influencias negativas siempre intentan perturbar, obstruir o bloquear el camino de maestro y discípulo, el camino de los sucesores. También buscan aprovechar cualquier división o trastorno que surja.

Cuando el Daishonin dice «¡formen filas y síganme!», el énfasis está en «síganme», es decir, en continuar con su trabajo. La vida y la esencia del kosen-rufu mundial yacen en ese compromiso mancomunado, en esa dinámica continuidad en el espíritu y en el esfuerzo. Es lo que enseñan el Sutra del loto y los escritos de Nichiren Daishonin.

Después de exhortar a sus discípulos a superar incluso a grandes maestros como T’ien-t’ai y Dengyo, el Daishonin prosigue escribiendo: «Si vacilan ante las amenazas del gobernante de este pequeño país insular [y abandonan la fe], ¿cómo piensan enfrentar la furia mucho más temible de Yama, el señor de los infiernos?7 Si dicen ser mensajeros del Buda pero se entregan al miedo, ¡serán las personas más despreciables!».8

Alentaba e incentivaba a sus seguidores con inmensa benevolencia. Conceptuando al regente del Japón como el mero «gobernante de este pequeño país insular», él tomó la delantera y pidió a sus discípulos que avanzaran y lo siguieran.

Ese estado de vida monumental es un eterno modelo para todas las personas. Valorando profundamente este digno estado de vida del Daishonin, la SGI está propagando la Ley Mística en todo el mundo y abriendo rutas hacia la paz y la felicidad de todo el género humano.

Espero que ustedes, nuestros miembros de la División de Jóvenes de la SGI, transiten este camino de eterno honor junto a mí y continúen mi trabajo como sucesores.

De un discurso pronunciado en una reunión de líderes de la División de Jóvenes de la SGI celebrada en Tokio el 10 de julio de 1991.

Sabiduría para ser feliz y crear la paz es una selección de las obras del presidente Ikeda sobre temas clave.

  • *1El comportamiento del devoto del «Sutra del loto», en Los escritos de Nichiren Daishonin (END), pág. 803.
  • *2Persecución de Tatsunokuchi: Fallido intento, instigado por poderosas figuras del gobierno, de decapitar al Daishonin al amparo de la noche en la playa de Tatsunokuchi, en las afueras de Kamakura, el 12 de setiembre de 1271.
  • *3Myoho-renge-kyo se escribe con cinco ideogramas chinos, mientras que Nam-myoho-renge-kyo se escribe con siete (namu o nam se compone de dos caracteres). Sin embargo, el Daishonin a menudo usa ambos términos como sinónimos en sus escritos.
  • *4El comportamiento del devoto del «Sutra del loto», en END, pág. 803.
  • *5Rey Demonio del Sexto Cielo: También conocido como Rey Demonio o demonio celestial. Soberano de las funciones demoníacas, que habita en el sexto cielo del mundo del deseo, el más alto de todos. También se lo llama «El Que Goza Manipulando a Su Voluntad el Producto de las Cosas Conjuradas por Otros», el rey que utiliza a su placer el fruto del esfuerzo ajeno. Asistido por incontables funciones subordinadas, obstruye la práctica budista y disfruta consumiendo la vitalidad de otros seres, como manifestación de la ignorancia fundamental inherente a la vida humana. Este Rey Demonio personifica la tendencia negativa a imponer la propia voluntad sobre los demás a cualquier costo.
  • *6El Sutra del loto, Tokio: Soka Gakkai, 2014, cap. 23, pág. 285.
  • *7Yama: También conocido como «Rey Yama» o «Yama, señor de los infiernos». En la mitología budista, es el monarca del mundo de los difuntos, quien juzga y determina las recompensas y castigos de los muertos.
  • *8El comportamiento del devoto del «Sutra del loto», en END, pág. 803.