Parte 3: El kosen-rufu y la paz mundial
Capítulo 21: Una vida dedicada al kosen-rufu [21.1]

21.1 El propósito del budismo Nichiren es el kosen-rufu

No te preguntes
si la impetuosa corriente del kosen-rufu
es el resultado inevitable de la historia.
Pregúntate, mejor,
si existe en ti la pasión
de hacer inevitable el kosen-rufu
a través de tu esfuerzo y tu sudor.


Este es un célebre pasaje de un poema del presidente Ikeda titulado «Un azul más profundo que la planta del índigo». El logro del kosen-rufu y, en última instancia, de la paz mundial, es el noble ideal al cual dedicó su vida entera, y es el propósito del budismo Nichiren.

La tercera parte de esta selección de extractos de las orientaciones del presidente Ikeda se titula «El
kosen-rufu y la paz mundial», y expone su filosofía pacifista, basada en el budismo Nichiren.

Este capítulo inicial que lleva como título, «Una vida dedicada al
kosen-rufu», se centra en las guías extraídas de varios textos sobre la esencia de dicho ideal y nuestra misión como practicantes budistas.

El propósito de la vida es la felicidad. Y el anhelo que palpita en todas las personas es la paz. La historia, por tanto, debe transcurrir en dirección a la dicha y a la paz.

Los seres humanos, por naturaleza, buscamos un firme principio orientador que nos permita lograr estas metas. La ciencia, el gobierno, la sociedad y la religión también deben enfocarse en la dicha y en la paz humanas.

Nichiren Daishonin —quien consideraba los sufrimientos del pueblo como su propia aflicción— se puso en acción dispuesto a «establecer la enseñanza correcta para asegurar la paz en la tierra». Enarbolando este ideal, dejó claros principios que nos guían hacia la paz y la felicidad.

El Daishonin escribe: «¿[P]uede haber dudas de que la gran Ley pura del Sutra del loto [Nam-myoho-renge-kyo] se propagará ampliamente [en jap.: kosen-rufu] en todas partes del Japón y en los demás países de Jambudvipa [es decir, el mundo entero]?».1

El budismo Nichiren enseña que todos los seres poseen, por igual, la naturaleza de buda y corporifican el principio de los «tres mil aspectos contenidos en cada instante vital».2

También revela el medio por el cual podemos romper cualquier cadena que nos limitan. En la medida en que esta filosofía afirma la dignidad, igualdad y libertad de todas las personas, es una religión mundial comprometida a establecer la paz del género humano. Por tanto, iluminará el siglo XXI e irradiará al mundo la gran luz de la felicidad universal.

Del capítulo «La salida del sol», del volumen 1 de La nueva revolución humana.


*

La característica más distintiva del budismo Nichiren es su énfasis en el kosen-rufu, la propagación amplia y global de la Ley Mística.

Es una enseñanza que nos exhorta a dedicarnos a propagar en cada rincón del mundo esa ley universal de la vida, y a promover la felicidad y la paz para todas las personas, porque esta es la misión con la cual hemos nacido y es también el camino hacia nuestra propia dicha.

Así pues, en el budismo Nichiren, practicamos para nosotros y para los demás. Nos esforzamos en nuestra práctica budista no solo para obtener los beneficios de la Ley, sino para compartir las enseñanzas con nuestros semejantes y darles a conocer este camino, de manera que ellos también obtengan los mismos beneficios.

El Daishonin afirma: «[N]o solo debe perseverar en su práctica personal, sino también enseñar a los demás. […] Enséñeles a otros con toda su capacidad, aunque solo sea una oración o frase».3 Las dos ruedas de nuestra práctica budista son la recitación de Nam-myoho-renge-kyo y la transmisión del budismo Nichiren a otras personas.

Esta filosofía también recalca la importancia de «establecer la enseñanza correcta para asegurar la paz en la tierra».

A lo largo de su vida, el Daishonin afirmó la necesidad de propagar la enseñanza correcta y de establecer con solidez los principios filosóficos del budismo en el corazón de cada individuo, y crear, de este modo, una sociedad pacífica y próspera para todos.

Desde una perspectiva, puede decirse que «establecer la enseñanza correcta» —es decir, propagar ampliamente la Ley Mística— representa nuestra misión religiosa como practicantes del budismo Nichiren, y que «asegurar la paz en la tierra» se refiere a nuestra misión social.

Nichiren Daishonin escribe: «Si a usted le importa su seguridad personal, debe ante todo orar por el orden y la tranquilidad en los cuatro sectores del territorio, ¿no lo cree así?»4 El «orden» y la «tranquilidad en los cuatro sectores del territorio» se refieren a la paz social. Estamos cumpliendo nuestra misión como practicantes del budismo Nichiren toda vez que procuramos construir una cultura de paz, mejorar la sociedad y transmitir paz y prosperidad en bien de todos nuestros semejantes.

Del capítulo «Florecer», del volumen 15 de La nueva revolución humana.

Sabiduría para ser feliz y crear la paz es una selección de las obras del presidente Ikeda sobre temas clave.

  • *1La selección del tiempo, en Los escritos de Nichiren Daishonin (END), Tokio: Soka Gakkai, 2008, pág. 576.
  • *2Tres mil aspectos contenidos en cada instante vital (en jap.: ichinen sanzen): Sistema filosófico desarrollado por el gran maestro T’ien-t’ai de la China, basado en el Sutra del loto. Los «tres mil aspectos» indican los aspectos y fases variables que adopta la vida a cada momento. A cada instante, la vida manifiesta alguno de los diez estados. Cada uno de estos diez estados posee en sí mismo el potencial de los diez, lo cual da un total de cien estados posibles. Cada uno de estos cien estados posee los diez factores y opera dentro de cada uno de los tres planos de la existencia, totalizando tres mil aspectos. En otras palabras, todos los fenómenos están contenidos en cada instante vital, y cada instante vital impregna los tres mil estados o aspectos de la existencia; es decir, la totalidad del mundo fenoménico.
  • *3El verdadero aspecto de todos los fenómenos, en END, pág. 408.
  • *4Sobre el establecimiento de la enseñanza correcta para asegurar la paz en la tierra, en END, pág. 25.