Parte 1: La felicidad; Capítulo 8:
La postura ante la enfermedad [8.3]

8.3 Entonar Nam-myoho-renge-kyo es la fuente de nuestra vitalidad

El daimoku es la fuente que nos posibilita afrontar cualquier dolencia y convertirla en una oportunidad para concretar nuestra revolución humana.

Mi esposa y yo estamos orando con profunda sinceridad cada día para que nuestros miembros vivan con salud y victoria, mientras avanzan por el camino del kosen-rufu.

Algunos de ellos están luchando contra enfermedades diversas. Pero eso no significa que sean personas infelices o que no puedan actuar en bien del kosen-rufu. Quienes practican la Ley Mística sin falta serán dichosos de verdad.

El filósofo y educador suizo Carl Hilty escribió: «La enfermedad es un […] carril que nos conduce a un paso más alto de la vida».1

Los que han pasado por esta experiencia suelen ser personas mucho más consideradas con los demás. El contacto con las dolencias físicas nos vuelve más compasivos. La enfermedad nos enseña muchas cosas. Nos permite mirar a la muerte de frente y pensar en el significado de la existencia. Nos lleva a comprender cuán valiosa es la vida. Es, en efecto, un carril que nos lleva a una existencia más elevada, y, en tal sentido, es un rico aprendizaje. Para los que se basan en la Ley Mística, todo se convierte en una energía creadora de felicidad y en el combustible que alimenta la autosuperación.

El señor Toda aseguraba: «El beneficio del Gohonzon nos recarga con una tremenda fuerza vital. Con esa vitalidad intensa y concentrada, podemos abandonar la actitud de quejas o de lamentaciones ante nuestros problemas, sufrimientos, pobreza o desventuras, y, a cambio, cultivar un estado interior de alegría e iluminación». También dijo: «El poder del daimoku es impresionante. Puede transformar un karma nefasto, convertirlo en un proceso como pasear por un jardín florido o como disfrutar de un sueño paradisíaco».

Cuando estén sufriendo, hagan daimoku. Cuando se sientan estancados, hagan daimoku. Si actúan así, multiplicarán su valentía y vitalidad, y darán un giro a sus circunstancias. Nuestra práctica budista es el motor de la victoria en todas las cosas.

Del discurso pronunciado en un curso de capacitación de líderes en Nagano, el 15 de agosto de 2005.

La «sabiduría para ser feliz y crear la paz» es una selección de las obras del presidente Ikeda sobre temas clave.

  • *1HILTY, C.: Kranke Seelen (Almas enfermas), Leipzig: J. C. Hinrichs’sche Buchhandlung, 1907, pág. 71.